Esta colección está pensada para quienes se atreven a salir de lo clásico, para las que disfrutan ponerle un sello personal a cada rincón de su casa, incluida la mesa. Porque sí, la forma en que servimos también habla de nuestro estilo.
Evora está inspirada en los colores de la naturaleza, en los tonos tierra y agua que transmiten calma, fluidez y conexión. La calidez de la cerámica, los matices imperfectos y las texturas suaves hacen que cada pieza se sienta única. Aquí no hay blancos puros ni acabados brillantes; hay profundidad, carácter y mucha personalidad. Es una vajilla que invita a mezclar, a crear combinaciones diferentes y a dejarse llevar por la intuición.
Evora no es para seguir reglas, es para inventar nuevas formas de poner la mesa. Cada plato puede convivir con otro distinto y seguir viéndose increíble. Y esa es justo la magia.
¿Y cómo combinarla? De muchas formas. Puedes usar manteles o caminos de mesa en lino o algodón, en tonos neutros como crudo, arena o gris claro, para que las piezas realmente destaquen. Los cubiertos con detalles o los vasos de vidrio le suman un toque rústico que va perfecto con su esencia. Y si quieres llevarlo un paso más allá, anímate a mezclar distintos colores dentro de la misma colección. Un plato en tono tierra con un bowl agua, por ejemplo, puede transformar completamente la mesa sin perder armonía.
Al final, poner una mesa no es solo acomodar platos. Es crear una experiencia. Y con Evora, esa experiencia se vuelve diferente cada vez.
Porque no hay una única forma de usarla. No hay que seguir reglas. Se trata de jugar, de explorar combinaciones, de dejarte llevar por lo que te gusta y por cómo te quieres sentir.
¿Comida de fin de semana con amigas? ¿Cena informal en el jardín? ¿Un desayuno largo con café recién hecho? Evora va con todo eso, y más.
¿Te animas a probar algo distinto?